Greenwashing, también conocido como lavado ecológico o eco-lavado, es una práctica engañosa donde una empresa presenta una imagen errónea de responsabilidad y buena voluntad ambiental. Esta estrategia de marketing busca retratar productos o servicios como ecológicos, a pesar de que las prácticas reales de la empresa puedan ser negligentes o intencionalmente dañinas para el medio ambiente. El greenwashing es común en diversas industrias, incluyendo textiles, productos alimenticios, cosméticos y artículos para el hogar.
El objetivo principal del greenwashing es exagerar o fabricar el impacto ambiental positivo que una empresa está logrando. Al hacerlo, las empresas pueden aprovechar la disposición de los consumidores a comprar productos sostenibles o "verdes".