ACCIONES CLIMÁTICAS EN LA INDUSTRIA QUÍMICA

La producción química consume grandes cantidades de energía y genera emisiones significativas de CO₂ y otros gases de efecto invernadero. Gran parte de las operaciones aún dependen de fuentes de energía fósiles. La implementación de tecnologías de proceso bajas en carbono, la mejora de la eficiencia energética y el cambio a materias primas renovables pueden reducir drásticamente las emisiones, convirtiendo un riesgo importante en una oportunidad de transformación.

El seguimiento y la reducción de las emisiones de alcance 3 es especialmente difícil en la industria química debido a las vastas redes de suministro globales. Sin embargo, estas emisiones representan la mayor parte del impacto climático de una empresa. El establecimiento de programas de participación de los proveedores y la creación de marcos de datos sólidos permiten a las empresas abordar las emisiones más allá de sus operaciones directas y mejorar la sostenibilidad en toda la cadena de valor.

Con la Directiva Europea sobre Información Corporativa en materia de Sostenibilidad (CSRD), las empresas químicas se enfrentan a la obligación de divulgar información ESG. Esto requiere datos climáticos de alta calidad y auditables, así como estrategias transparentes. Las empresas que no se adapten corren el riesgo de perder el acceso al mercado. La presentación de informes estructurados y el apoyo en materia de cumplimiento por parte de expertos como FORLIANCE garantizan la preparación y la credibilidad.

Los inversionistas evalúan cada vez más a las empresas en función de su resiliencia climática y su desempeño en materia de emisiones. La industria química debe cuantificar los riesgos relacionados con el clima e integrar la sostenibilidad en la planificación financiera. Una estrategia climática basada en la ciencia refuerza la confianza de los inversionistas y alinea los modelos de negocio con las vías de descarbonización globales.

Los clientes, los reguladores y la sociedad civil exigen acciones climáticas tangibles, no solo promesas. Las acusaciones de «greenwashing» suponen un riesgo para la reputación. La comunicación transparente, la presentación de informes creíbles y la participación en proyectos climáticos certificados ayudan a demostrar el compromiso y a garantizar la confianza.

Rediseñar los productos y las vías de producción para reducir las emisiones incorporadas es un reto importante. Las empresas deben innovar sin perder rentabilidad ni rendimiento de los productos. FORLIANCE apoya esta transición mediante evaluaciones del carbono a lo largo del ciclo de vida, orientación en I+D e integración de soluciones basadas en la naturaleza para compensar las emisiones inevitables.